Nenuco es una fragancia que ha pasado de padres a hijos y que estos a su vez han compartido con los suyos. Desde 1939, son muchas las generaciones que han crecido junto a Nenuco. Los tiempos cambian, pero nuestra fragancia sigue fiel a sus origenes, fiel a su olor único que hace especial a los niños que la llevan. Porque sólo Nenuco huele a Nenuco.